
TERAPIA CONDUCTUAL
La terapia conductual está dirigida a niños, niñas y adolescentes que presentan conductas difíciles de manejar en casa, en la escuela o en otros espacios del día a día. Su objetivo es ayudarles a regular mejor sus emociones, aprender a respetar límites, mejorar su autocontrol y adquirir formas más adecuadas de expresar lo que sienten y necesitan.
En Cognitivo trabajamos con familias que se sienten agotadas por las rabietas constantes, la desobediencia, la impulsividad o los conflictos diarios. A través de técnicas conductuales y estrategias claras, acompañamos al niño/a y a sus cuidadores para transformar esas conductas disruptivas en respuestas más funcionales, respetuosas y ajustadas a cada contexto.
¿Cuándo debo acudir a terapia conductual?
Es recomendable considerar una evaluación en terapia conductual cuando observas que tu hijo/a:
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Se irrita con facilidad y pierde el control con frecuencia.
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No le gusta cumplir límites y tiende a desafiar la autoridad.
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Tiene dificultades para esperar su turno, hacer fila, o tolerar retrasos y cambios de plan.
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Muestra una actitud desafiante constante (discute, grita, ignora lo que se le pide).
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No le gusta compartir con otros niños/as o se niega a prestar sus juguetes.
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Lanza objetos cuando se molesta, empuja o golpea con frecuencia.
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Le cuesta mantenerse tranquilo cuando se le pide, se levanta todo el tiempo o interrumpe.
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Es muy impulsivo y se le hace difícil concentrarse en una tarea.
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Tiene rabietas constantes que afectan la vida familiar, las rutinas y la dinámica en casa.
Si sientes que la convivencia se está haciendo cada vez más difícil, que ya no sabes qué más hacer o que la situación te sobrepasa, la terapia conductual puede ser una herramienta clave para recuperar el equilibrio y el bienestar de toda la familia.
Preguntas frecuentes (FAQ)
1. ¿La terapia conductual es solo para niños “malcriados”?
No. La terapia conductual no se basa en culpar al niño ni a la familia. Se centra en comprender por qué aparecen ciertas conductas, qué las mantiene y cómo modificarlas de manera respetuosa y efectiva.
2. ¿Desde qué edad se puede empezar terapia conductual?
Se puede iniciar desde edades tempranas, especialmente cuando ya se observan conductas que generan mucho malestar a la familia o al propio niño/a. Cuanto antes se intervenga, más fácil es redirigir los patrones de conducta.
3. ¿La terapia conductual es lo mismo que castigar?
No. Aunque puede incluir consecuencias claras y coherentes, la terapia conductual se basa principalmente en reforzar conductas positivas, enseñar habilidades nuevas y establecer límites claros y consistentes, no en castigos severos.
4. ¿Cada cuánto son las sesiones y cuánto duran?
Generalmente las sesiones se realizan una vez a la semana, con una duración aproximada de 45 minutos, aunque esto puede variar según el caso y el plan de intervención.
5. ¿Sirve la terapia conductual si mi hijo/a tiene autismo, TDAH u otro diagnóstico?
Sí. La terapia conductual es una herramienta muy útil en niños con autismo, TDAH u otros trastornos del neurodesarrollo, adaptando siempre las estrategias a sus características particulares y, si es necesario, trabajando en equipo con otras terapias.
6. ¿Cuánto tiempo tarda en verse mejoría?
Depende de la intensidad de las conductas, del tiempo que llevan presentes, de la constancia en la asistencia y de la aplicación de las estrategias en casa. En muchos casos se observan cambios progresivos en las primeras semanas o meses, aunque la consolidación de nuevos hábitos puede requerir más tiempo.




